Estoy esperando a que a mi vida llegue mayo; así como en primavera florecen los campos, así fue floreciendo mi amor por ti, fuiste mi mayo lleno de colores y perfumes bellos, pero así como pasa la primavera, así ha pasado este amor que un día te declaré, así como las flores se marchitan, así se ha marchitado mi sueño y mi esperanza. A mi vida está llegando el otoño y está dejando pasar mi octubre, eras mi mayo y mi abril lleno de flores bellas, pero me estoy cansado de esperar a que florezcan para mí, a que me entreguen su aroma.
¡Por favor!, ¡vete! Quiero que mi corazón vuelva a sentir el calor de un verano lleno de amor, pero ya no contigo, no quiero que mi vida te siga esperando, quiero que mis sentimientos hacia ti se marchiten con la llegada de un otoño y que se desvanezcan bajo la nieve de un invierno, quiero que el hielo de mi corazón sea derretida por el fuego de un nuevo mayo, aquel que quedará grabado en mi vida para siempre. Me he cansado de esperar a que me des tu amor, me he cansado de esperar a que seas mi mayo y mi verano lleno de calor, me he cansado de ser siempre yo el que te busque, el que dé el calor para que este abril sea primavera, y no sé qué hacer, ¡vete!, sal de mi vida y mi pensamiento, vuélvete un otoño, aléjate en el invierno, mismo que me ha robado tu fragancia y tu aroma.
¡Vete!, sé de hoy en adelante la nieve que un verano vino a convertir en nada, se tú el último rastro del invierno que me has hecho vivir y la última huella de este enero que es frío y doloroso, por qué a mi corazón y a mi vida ha llegado un nuevo mayo y mi vida, sigue sus estaciones, pero, por el momento prefiere seguir esta temporada de la mano de otra ilusión, y bajo el aroma de una nueva primavera, forjar al calor de un nuevo verano ese sentimiento que a tu lado, sólo fue para mí… Un invierno.
Colaboración de Simplemente Adrián
México